Santa Margarita de Cortona, Terciaria Franciscana. Siglo XIII.
De familia de campesinos, huye con un terrateniente, con quien vive ocho años de lujos y tiene un hijo. Al morir su compañero, entra en contacto con los Padres Franciscanos. En sus últimos años de vida, atendió a toda clase de enfermos.
Tu tiempo es limitado
En el discurso que Steve Jobs, fundador de Apple, a los universitarios de Stanford, recordaba un hecho de su vida:
«Cuando tenía 17 años, leí una cita que decía algo parecido a “Si vives cada día como si fuera el último, es muy probable que algún día hagas lo correcto”. A mí me impresionó y desde entonces, durante los últimos 33 años, me miro al espejo todas las mañanas y me pregunto: “Si hoy fuera en último día de mi vida, ¿querría hacer lo que estoy a punto de hacer hoy?” Y cada vez que la respuesta ha sido “No” por varios días seguidos, sé que necesito cambiar algo.
»Recordar que moriré pronto constituye la herramienta más importante que he encontrado para ayudarme a decidir las grandes elecciones de mi vida. Porque casi todo —todas las expectativas externas, todo el orgullo, todo el temor a la vergüenza o al fracaso—, todo eso desaparece a las puertas de la muerte, quedando solamente aquello que es realmente importante. Recordar que van a morir es la mejor manera que conozco para evitar la trampa de pensar que tienen algo que perder. Ya están desnudos. No hay ninguna razón para no seguir a su corazón. Casi un año atrás me diagnosticaron cáncer. Me hicieron un escáner a las 7:30 de la mañana y claramente mostraba un tumor en el páncreas. Yo ni sabía lo que era el páncreas. Los doctores me dijeron que era muy probable que fuera un tipo de cáncer incurable y que mis expectativas de vida no superarían los tres a seis meses. Mi doctor me aconsejó que me fuera a casa y arreglara mis asuntos, que es el código médico para prepararte para la muerte.
»Significa intentar decirle a tus hijos todo lo que pensabas decirles en los próximos 10 años, decirlo en unos pocos meses. Significa asegurarte de que todo esté finiquitado de modo que sea lo más sencillo posible para tu familia. Significa despedirte. Viví con ese diagnóstico todo el día. Luego, al atardecer, me hicieron una biopsia en que introdujeron un endoscopio por mi garganta, a través del estómago y mis intestinos, pincharon con una aguja mi páncreas y extrajeron unas pocas células del tumor. Estaba sedado, pero mi esposa, que estaba allí, me contó que cuando examinaron las células en el microscopio, los doctores empezaron a llorar porque descubrieron que era una forma muy rara de cáncer pancreático, curable con cirugía. Me operaron y ahora estoy bien.
»Fue lo más cercano que he estado a la muerte y espero que sea lo más cercano por unas cuantas décadas más. Al haber vivido esa experiencia, puedo contarla con un poco más de certeza que cuando la muerte era un útil pero puramente intelectual concepto: Nadie quiere morir. Incluso la gente que quiere ir al cielo, no quiere morir para llegar allá. La muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y es como debe ser porque la Muerte es muy probable que sea la mejor invención de la Vida. Es el agente de cambio de la Vida. Elimina lo viejo para dejar paso a lo nuevo. Ahora mismo, ustedes son lo nuevo, pero algún día, no muy lejano, gradualmente ustedes serán viejos y serán eliminados. Lamento ser tan trágico, pero es muy cierto.
»Su tiempo tiene límite, así que no lo pierdan viviendo la vida de otra persona. No se dejen atrapar por dogmas —es decir, vivir con los resultados del pensamiento de otras personas—. No permitan que el ruido de las opiniones ajenas silencien su propia voz interior. Y más importante todavía, tengan el valor de seguir su corazón e intuición, que de alguna manera ya saben lo que realmente quieren llegar a ser. Todo lo demás es secundario.»
Después hablaba de un libro que «en la tapa trasera de la última edición, había una fotografía de una carretera en el campo temprano en la mañana, similar a una en que estarían haciendo dedo si fueran así de aventureros. Debajo de la foto decía: “Manténganse hambrientos. Manténganse descabellados.” Fue su mensaje de despedida al finalizar. «Manténganse hambrientos. Manténganse descabellados. Siempre he deseado eso para mí. Y ahora, cuando se gradúan para empezar de nuevo, es lo que deseo para ustedes. Permanezcan hambrientos. Permanezcan descabellados. Muchas gracias.»
El éxito del hijo de Dios es lo que buscamos. Necesitamos hambre de conocer, vivir una vida en la que cada día hagamos lo que más interesa, aprovechar el tiempo, prepararnos para influir llenando el mundo de espíritu cristiano, hacer felices a los de al lado, luchar contra lo injusto, estudiar y trabajar… Un hijo de Dios no puede ser mediocre: no es un rasgo de la familia de Dios. Entonces la vida es maravillosa.
Padre, quiero vivir como hijo tuyo. Que cuando me mire en el espejo me pregunte «si hoy fuera en último día de mi vida, ¿querría hacer lo que estoy a punto de hacer hoy?…» El tiempo es limitado y tú cuentas conmigo para muchas cosas.
Comenta con tus palabras a tu Padre Dios lo que has leído.
Ver todos Ver enero 2022